Solo con este título, habré perdido miles de lectores, casi todos ellos informáticos. A los que os hayáis quedado, gracias por la atención. Espero convenceros de que WordPress, en el año [insert año actual, sea el que sea], sigue siendo una revolución que va a más cada día.

    Si miras WordPress como una herramienta para hacer webs con sus fotitos, sus textitos y poco más, te estás alejando de las casi infinitas posibilidades que ofrece. WordPress es un CMS, es decir, un Content Management System, un Sistema de Gestión de Contenidos. Si WordPress me ha enganchado ha sido sobre todo por la última palabra: Contenidos.

    WordPress en mi corassón. Retoque de imagen de NoName_13 de Pixabay

    Contenidos, la clave de todo

    Estoy cansado de todos los anuncios que me salen de diferentes CMS para crear webs. Todas son iguales. Todas se ven con la misma plantilla, y según la moda de turno, puede haber hero banners, sliders de productos, CTAs… Pero ¿y el contenido? ¿Dónde están esas webs de WordPress que muestran contenidos diferentes en función del usuario, del dispositivo, con formularios ricos en opciones, etc? Esos anuncios piensan que poner una foto a pantalla completa con un menú en una cabecera transparente es lo más atractivo que se puede hacer, y no saben cuánto están limitando su propia herramienta.

    Con WordPress he hecho Creactivers, una plataforma para activistas creativos, donde los usuarios se registran, arrastrando un pin en un mapa y fijando su localización. Luego, pueden añadir sus propias acciones, también geolocalizadas, y añadir vídeos de YouTube (por cierto, validando la url introducida). Todo esto lo he programado yo, peleándome con APIs, dejándome los ojos en Stack Overflow (ya sabéis que no soy desarrollador, sino comunidacta). Por si fuera poco, también programé un buscador de usuarios avanzado, algo que ningún plugin de WordPress ofrecía. Míralo aquí.

    Desde que WordPress 5.0 incorporó el constructor de páginas Gutenberg, aposté por él. Gutenberg, que tanta polémica levantó en sus inicios, se ha convertido en una herramienta muy flexible. La transición del editor clásico a Gutenberg fue un poco traumática, pero mereció la pena. En 2021 se conviertió en estándar, y ya han implantado la creación por bloques incluso en widgets. De nada sirve resistirse al sistema de bloques; al fin y al cabo, hay miles de personas detrás de WordPress, y esa gente sabe lo que hace. Mi consejo: olvídate de Elementor y Divi, a menos que te guste consumir recursos de tu servidor.

    El código es poesía. ¡Quién lo diría! Imagen de Alexander Gounder de Pixabay

    Algunas ventajas (avanzadas) de una buena web en WordPress

    Después de varios años creciendo en paralelo a WordPress, tengo mi top 5 de ventajas. Quiero ir un poco más allá que las típicas ventajas («Fácil de manejar», «Adaptable a dispositivos», etc) con algunas ideas más avanzadas:

    • Construir formularios de lo más variopinto. ¡Se puede hacer tanto con un buen formulario! No solo enviar una duda o un contacto. Se pueden publicar entradas personalizadas desde el frontend, realizar cobros (principalmente con Stripe y/o Paypal), hacer formularios complejos con lógica condicional como reservas de habitaciones, etc. O encuestas, quizzes tipo Buzzfeed… Para ello, recomiendo Contact Form 7 (muy polémico por su presunta sobreutilización de recursos, hoy en día controlable con plugins como Asset CleanUp), especialmente por los plugins que lo expanden (de lógica condicional, avisos personalizados, mapeo de metaetiquetas, etc.) o Forminator.
    • Posicionarte más allá de las redes sociales. Cada día gana en importancia la necesidad de posicionarse en internet, porque con las redes sociales te darás a conocer, pero con tu contenido posicionado les convencerás. Mis plugins favoritos para ello: The SEO Framework y el (casi) todopoderoso Yoast SEO.
    • Ver «la película completa» de tu estrategia. Ahí sí que entra el diseño y los themes. Ejemplo: hay themes que te permiten establecer paletas de colores, y preparar el terreno para un posible modo oscuro/claro, que aún no está muy implantado en las webs personales. Sí, es algo que una variable CSS puede solucionar de la misma manera, pero la interfaz de algunos temas ahorra mucho tiempo, que puedes dedicar a crecer en otros aspectos. Mi theme favorito: Kadence. Verás el alucinante sistema de cabeceras y pies de página.
    • Gestión de usuarios con sus permisos. Esto es vital, y no muy destacado como se merece en los foros y webs especializadas. Puedes crear diferentes roles de usuarios con permisos para acceder a cualquier contenido, tanto en el frontend como en el backend. Con esto, sumado a la capacidad de crear entradas y categorías personalizadas, ahí es donde reside el gran potencial de WordPress. Para roles de usuario, ni te lo pienses: User Role Editor. Para tipos de contenido personalizado, la gente ama Advanced Custom Fields, pero yo recomiendo Pods, que permite un trabajo fácil con plantillas sin tener que usar temas hijo, y tiene una gran comunidad de desarrolladores detrás.
    • Dejar un trabajo fácilmente heredable. Si hoy tienes un cliente que mañana, por cualquier motivo, no tendrás, es más ético dejar una web en herencia a alguien con conocimientos. Porque todos conocemos a los informáticos, que cuando heredan una web realizada por otro informático, ponen el grito en el cielo y tal vez intentarán convencerte de que es mejor borrar todo y empezar de nuevo. Con WordPress, si elegiste a alguien que sabe, si el que venga detrás es mínimamente profesional, sabrá entender los puntos fuertes y los puntos débiles del trabajo.
    Organizar, editar y finalmente publicar. Imagen de Werner Moser de Pixabay

    ¿Cómo tiene que ser una buena web en WordPress?

    En mi experiencia, una buena web realizada bajo WordPress tiene que cumplir estos requisitos básicos:

    • Que sea segura. Esto no solo depende de tu instalación de WordPress. Depende casi más de tu proveedor de hosting: que instale correctamente tus certificados SSL, que realice copias de seguridad regularmente, que tenga un buen sistema anti-ataque DDoS (limitación de intentos de acceso, bloqueo por IP/país, etc.) Todas las capas de seguridad, a ser posible a nivel de servidor.
    • Que sea rápida. Lo que todos quieren. Hoy día, los servidores más rápidos corren (literalmente) con tecnología LiteSpeed. El plugin LiteSpeed Cache es superior al famoso WP Rocket, pero deberás tener LiteSpeed en tu servidor, no Apache o NGINX. Si tu servidor usa LiteSpeed, estás de enhorabuena. Sácale el partido y podrás incluso cachear usuarios logueados. Es más, esta tecnología tiene su propio sistema de CDN, Quic.Cloud, un CDN específico para WordPress, que no le queda a la zaga al famoso Cloudflare.
    • Que cumpla con las normativas. Pocos se preocupan por este aspecto, pero el cumplimiento de las normativas en materia de protección de datos (GDPR, CCPA, etc.) es vital. Configurarlo es muy engorroso, pese a que existan plantillas de políticas prediseñadas. Además, tu web tendrá siempre unas necesidades propias, sobre todo cuando interactúas con usuarios (es decir, una tienda online), así que preocúpate de redactar unas buenas políticas de protección de datos, con un correo real al que puedan contactarte, unos términos del servicio reales y una política de devolución de productos a prueba de listillos.
    • Que aporte algo que las redes sociales no aporten. Las redes, como he dicho, te dan a conocer, pero ese cliente te va a buscar a tu web (o ha llegado mediante tus redes), y ahí tienes que darle lo que en las redes no va a encontrar: una experiencia de compra de tu producto segura, descuentos por apuntarse a tu newsletter… Si llegan a tu web, no los dejes ir.
    • Que sea lo más «artesanal» posible. Muerte a las plantillas prediseñadas. Hacen que todas las webs parezcan la misma. Crea tus propios botones, tus propios márgenes, tus propios interlineados, etc. incluso si no eres experto/a en diseño. Es más cercana una web con pequeñas imperfecciones que una web demasiado perfecta.

    Bonus track: el truqui de GitHub

    Para terminar, un pequeño truco extra que utilizo mucho: no todos los mejores plugins están en el repositorio de WordPress. Algunos muy interesantes se encuentran en GitHub. Mi consejo es que busques empezando por los recientemente actualizados, para maximizar la posibilidad de que sigan en mantenimiento activo. En ese repositorio se encuentra, por ejemplo, uno de los mejores plugins multilingüe, el qTranslate-XT, que no está en el repositorio de WordPress.

    Ya sabes que yo trabajo mucho con WordPress, pero también toco muchas otras áreas creativas de generación de contenido. Aquí puedes ver mis trabajos.

    ¡Compártelo!

    Publicaciones Similares

    Deja una respuesta

    Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *